
LA VISIÓN DEL AMOR
Tenemos la tendencia de mirar el pasado. Cuando vemos a alguien lo miramos con toda su historia, con todos los preconceptos que hemos construido a lo largo del tiempo.
No lo vemos tal como es ahora, los juicios y condenas que hemos forjado nos impide verlo tal como es en estos momentos. En lugar del presente sólo vemos su pasado. Lo hemos condenado para siempre, y nos hemos condenado, pues tal como lo vemos nos vemos así mismos.
Solo cuando perdonamos nuestros juicios y condenas, sanamos el pasado, entonces podremos ver un presente de paz, de inocencia y de alegría.
Es el momento en que nuestras miradas se cruzan y encontramos un brillo en sus ojos que antes no percibíamos, es la luz que nos dio origen antes del surgimiento del tiempo y que nos mantiene unidos más allá del mismo. En ese instante santo vemos con otros ojos, ya no vemos errores ni culpas, sólo amor, gozo de Ser y de compartir. Nos hemos reencontrado y reconocido en la visión del amor que se ha asentado en nuestro corazón y con emoción nos decimos que tu eres yo. El pasado ha desaparecido y el eterno presente ha emergido.
Oscar Gómez Díez